Los
hombres violentos no toleran bien la frustración, consideran a su pareja como
algo de su propiedad y no se resignan a perderla. Así, si has puesto fin a la
relación de violencia, alejándote de tu agresor, es importante que tomes una
serie de precauciones para poder evitar una nueva victimización y facilitar
a las autoridades su labor de protegerte:
1.
Nunca aceptes hablar con tu excompañero
violento a solas. Quedar
con tu expareja a solas puede ser muy peligroso para ti. Si es necesario el
encuentro, tenlo en el despacho de tu abogado. Si sabes con antelación que existe la posibilidad de coincidir con él (en actuaciones
judiciales conjuntas, por ejemplo), pide a algún familiar o persona de
confianza que te acompañe y comunica esta situación a las autoridades que, en
su caso, valorarán qué medida de protección será la adecuada. Si tu
excompañero tiene derecho de visitar a vuestros hijos, los niños deben ser
entregados fuera de la casa, en algún lugar acordado previamente. También puedes utilizar el punto de encuentro familiar
existente en tu municipio, con personal especializado para ayudar al
cumplimiento del régimen de visitas establecido por el Juzgado, de modo que se
realice con unas mínimas garantías de seguridad. Solicita información sobre
ellos en los servicios sociales de tu Ayuntamiento o Diputación. El
requerimiento de ver a los hijos puede ser un pretexto del agresor para
acercarse a ti. Intenta que la entrega y recogida la efectúe una persona de tu
confianza, para evitar así el contacto directo con tu agresor. El pago de los
alimentos también puede ser una excusa para los encuentros o las agresiones por
parte de tu excompañero. Abre una cuenta bancaria donde se transfiera el dinero
y queden registradas las operaciones.
2.
Comunica a tus allegados la imposición
de la orden de alejamiento, para
que no den información sobre tu paradero al agresor ni te pases sus llamadas o
te transmitan mensajes suyos.
3.
No consideres la casa de personas
cercanas como un refugio permanente. Debes tener claro que esto no
es recomendable, pues será los primeros lugares donde el agresor te buscará,
pudiendo llegar incluso al acoso.
4.
Informa de tu situación en el trabajo, para
que no te pasen llamadas de tu agresor y para que llamen a la policía en caso
de ser necesario.
5.
Toma precauciones para que tus hijos no
le cuenten a su padre dónde te encuentras. Hay una serie de
pautas que puedes seguir al comunicarles la situación: explícales con claridad
lo que ocurre, evitando dramatizar pero sin disimular el peligro. Describe
objetivamente la conducta inadecuada de su padre y el miedo que te produce.
Explica que parte de los motivos por los que has decidido alejarte de él es
protegerles de su violencia y sé sincera sobre las oportunidades que le has
dado de cambiar sin éxito. Es importante que no les hables irritada o angustiada,
para evitar que aumente su angustia. Evita emplear insultos al referirte a su
padre y no pongas en duda los sentimientos que ellos puedan sentir hacia él. Aclara
que entiendes que se encuentran asustados y confusos, que tú también tienes
miedo, pero deja claro que ese comportamiento es inadmisible y peligroso y que tienes
que intentar protegerles de ello.
6.
En caso de que seas tú quien tiene la custodia
de los niños, deberás acudir al centro escolar de tus hijos, o a
cualquier centro de actividades al que acudan regularmente, y explicar la situación
a la dirección del mismo, de forma que sólo tú o la persona que
autorices pueda recoger a los niños. Es conveniente que esta solicitud la hagas
por escrito y firmada.
7.
Si tus hijos son pequeños, asegúrate de
que sepan bien los nombres completos, la dirección donde os alojáis y el
teléfono de casa y de la familia (abuelos, tíos, etc.). Hazles
una tarjeta con esos datos y con el número de la policía, del abogado/a y de
alguna otra persona a la que puedan acudir ante cualquier problema. Enséñales a pedir ayuda, haz que memoricen el número
de emergencias (112).
8.
Enseña a tus
hijos conductas de precaución. Si tus hijos son pequeños,
trata de explicarles que no pueden irse con su padre sin avisarte primero a ti.
Dales instrucciones para que no abran la puerta ni den datos por teléfono ni a
desconocidos ni al padre, si éste se presenta o llama. Razona con ellos porqué
es necesaria la separación y porqué, durante algún tiempo, no verán al padre.
9.
Cambia todas tus contraseñas digitales, de forma que tu agresor no
pueda acceder a tu información personal y conversaciones accediendo ilegalmente
al sistema de tus dispositivos electrónicos con acceso a internet.
10. Evita
aplicaciones móviles con geo localizador que puedan ofrecer información
sobre tu paradero.
11.
No facilites tus datos e información
personales a desconocidos ni en las redes sociales. Permite el conocimiento de esta
información exclusivamente a personas de tu más estricta confianza.
12. No
cuelgues fotos ni proporciones información en timeline o tiempo real, que
puedan indicar dónde te encuentras en cada momento.
13.
Evita los lugares que frecuente el
agresor, donde
piensas que es más probable que te lo encuentres.
14.
Es importante que cambies tus rutinas y
horarios. Procura
no frecuentar los lugares habituales conocidos por el agresor como comercios,
paradas de autobús, lugares de encuentro, parques, etc. Si tienes posibilidad,
cambia también tus horarios de trabajo. Si además eres funcionaria o tienes
movilidad en tu empresa, solicita un cambio confidencial de destino.
15.
Asegúrate de
que la mirilla de tu puerta tiene buena visibilidad y, si puedes, instala un
portero automático. Antes de abrir
la puerta, comprueba qué persona está llamando. Si no la ves claramente, no
abras.
16.
Antes de entrar
o salir de la vivienda o del trabajo, asegúrate de que tu agresor no se encuentra
en las proximidades. Mira por las
ventanas que den a la calle y, antes de salir del portal, mira a ambos lados. Si ves
a tu agresor, cierra la puerta rápidamente y refúgiate en tu domicilio o en
casa de un vecino. Si crees que no te dará tiempo a entrar en casa (en
ocasiones se nos caen las llaves al suelo con los nervios), golpea las puertas
de los vecinos y grita pidiendo auxilio. Si estás en tu empresa, busca a un compañero
de trabajo e informa a la dirección. Llama a la policía o pide que lo hagan por
ti.
17.
Toma
precauciones al coger el coche. Si has
compartido el coche con el agresor, cambia las cerraduras. Antes de montarte y
bajarte del vehículo observa las inmediaciones por si le ves. Activa siempre el
cierre automático de las puertas del coche y no aparques en sitios poco
iluminados ni poco transitados, mejor si es un aparcamiento con videovigilancia.
No lleves las ventanas del coche completamente bajadas si no es necesario. Si
vas a hacer la compra y llevas bolsas, no te pares a organizarlas fuera del
coche, introdúcelas y organízalas después en casa.
18.Trata
de ir siempre acompañada en la medida de lo posible. Intenta
no ir nunca sola a desayunar o almorzar en tu horario de trabajo y pide que un
compañero que te acompañe al coche o busca alguien con quien ir a la parada de
autobús o tren, para no quedarte sola en ningún momento. Apréndete el horario
del autobús para no tener que esperar demasiado tiempo en la parada. No vuelvas
sola a casa.
19.
Si tienes la posibilidad de volver a
casa por varias rutas o
haciendo una pequeña parada, hazlo.
20.
Cuando te acompañen a casa, pide a tus
amigos que no se marchen hasta que entres en la vivienda. Haz lo mismo si te acompañan al
coche.
21.
Evita regresar a tu
domicilio en horarios de poco tránsito de viandantes, por zonas aisladas o solitarias, con poco tráfico.
22.
Evita caminar
por zonas oscuras o poco iluminadas.
23.
Evita pasear cuando estés enfadado o
hayas bebido, pues en
esos momentos tus niveles de conciencia y tus reflejos son más bajos y eres más
vulnerable.
24.
No uses auriculares cuando salgas a
hacer deporte. La
reducción del sonido a tu alrededor y tu concentración en la música podría
hacer que no te des cuenta si alguien te está siguiendo.
25.
Evita caminar por zonas desconocidas o
atajos que
puedan llevarte a una vía sin salida
26.
Evita la ropa o el calzado
excesivamente incómodos, como
tacones altos o faldas de tubo que puedan impedirte correr si es necesario.
27.Lleva
las llaves de casa o del coche en la mano, de forma que puedas
entrar rápidamente si adviertes un peligro.
- Cuando camines por la calle,
procura ir en sentido contrario a la marcha de los vehículos y gírate de
vez en cuando. Es importante que tengas una buena perspectiva de la calle, para
localizar a tu agresor si éste aparece, en coche o a pie. Es buena idea
caminar por el lado de la acera más cercano a la carretera, para
dificultar que tu agresor pueda pasar desapercibido si se esconde en una
esquina o un portal. Si esto ocurriese inesperadamente, no tendrías tiempo
de reaccionar e intentar huir, con lo que es importante prevenir esta
situación estando alerta cuando camines sola.
29. Lleva
siempre tu teléfono móvil a mano, con el número de emergencias en marcación
rápida. Es preferible dar una falsa alarma que sufrir una agresión.
30.
No respondas llamadas de teléfono con
identidad oculta o desconocidas y anota el número de éstas últimas llamadas.
31.
Lo ideal es cambiar el número de
teléfono móvil.
32.
Si te llama por teléfono con amenazas e
insultos, cuelga. Si puedes, conecta una grabadora al
teléfono para registrar las llamadas. Comunica la situación a tu abogado/a para
que pueda ponerlo en conocimiento del juez, y así poder intervenir las llamadas
y/o poner fin a dicha situación.
33.
Si te envía mensajes de texto, no los
borres. No
borres los mensajes que te envíe, ya sean amenazantes o no, pues podrían
constituir una de prueba en caso de incumplimiento de una orden de alejamiento.
34.
Intenta siempre llevar algo de dinero, por si necesitas coger un taxi
o realizar una llamada de teléfono (tu móvil podría encontrarse sin batería)
35. Es
recomendable que siempre lleves contigo una copia de la orden de alejamiento o
de cualquier otra medida cautelar judicial que se haya adoptado, será
de gran utilidad en caso de que la Policía intervenga. Facilitará su trabajo y
podrán ayudarte de una mejor manera. No dudes en
llamarles si tu agresor contacta contigo de alguna forma.
36. Sería muy aconsejable tomar
clases de autodefensa personal, algunas instituciones las imparten
específicamente para mujeres en tu situación. Las clases de autodefensa son muy
recomendables ya que, no sólo te ayudan a defenderte sino que mejoran tu forma
física y benefician tu salud, ayudándote a liberar estrés y a relacionarte
socialmente con otras personas.
Es
importante, aunque sientas una gran frustración en estos momentos, que intentes frenar, de ser posible, cualquier
intento que pudiera darse por parte de
tus amistades o familia de tomar represalias contra tu agresor, pues esto
solamente generará más violencia y no mejorará tu situación, sino todo lo
contrario.
Si
consigues que una resolución judicial le prohíba a tu agresor residir o aproximarse
a la vivienda que tenéis en común, tendrás que tomar otro tipo de medidas
adicionales por tu seguridad:
1.
Bajo ningún concepto dejes al agresor
entrar en casa.
2.
Comunica a tus vecinos de la imposición
de la orden de alejamiento, para
que puedan llamar a la Policía si le ven en las proximidades. Dales
instrucciones para que llamen a las autoridades en caso de que te escuchen
gritar.
3.
Refuerza la seguridad de la casa: Asegúrate de cambiar todas las
cerraduras de las puertas de acceso a la vivienda e intenta que la comunidad de
vecinos cambie la del portal, en su caso. Si está a tu alcance, instala un
sistema de seguridad con alarma. No des copias de tu llave ni tus códigos de
seguridad a personas que no sean de tu entera confianza.
4.
Solicita el cambio del número de
teléfono fijo de tu casa: Asegúrate de dar tus nuevos números de
teléfono solamente a personas de máxima confianza. Llama a tu compañía
telefónica y exige la confidencialidad de tus referencias. Si puedes, realiza
la solicitud también por escrito.
Si has abandonado el domicilio donde residías habitualmente y
te has trasladado a una vivienda que no conoce tu agresor:
1.
Informa a las personas con las que
convives o a tus vecinos de tu situación, para que puedan llamar a la
policía si ven que necesitas ayuda.
2.
Da
instrucciones a tus familiares y amistades para que no le den tu información
personal actual–modo de vida, teléfono, direcciones- a tu expareja.
3.
Ten cuidado con la dirección que
facilitas en las denuncias y otros documentos a los que pueda tener acceso el
agresor.
4.
Sería conveniente que recibas la
correspondencia en casa de alguien de absoluta confianza. En
algunas asociaciones de apoyo a mujeres, también puedes solicitar que reciban
tu correspondencia.
5.
Evita que el nuevo número aparezca en
la guía telefónica.
6.
Conoce los
alrededores. Pasea por los alrededores
para conocer posibles salidas o sitios a los que acudir en caso de encontrarte
con tu agresor.
Muchas
gracias por haberme dedicado tu tiempo.
*Todas estas recomendaciones
son orientativas y tienen un objetivo meramente psicoeducativo y preventivo. Si
eres víctima de violencia de género o piensas que puedes serlo o que alguien
que conocer puede serlo, ponte
inmediatamente en contacto con las autoridades. La recomendación más importante
de estas líneas es DENUNCIAR y CONFIAR EN LAS AUTORIDADES CORRESPONDIENTES.
Comentarios
Publicar un comentario
¿Quieres comentar esta entrada?